29/08/2024
El salario básico de los trabajadores rurales superará los 700 mil pesos en octubre tras los aumentos de la CNTA
A partir de octubre, el salario básico de los trabajadores rurales en Argentina superará los 700 mil pesos mensuales, tras los recientes aumentos otorgados por la Comisión Nacional de Trabajo Agrario (CNTA). Esta medida busca mejorar el poder adquisitivo de los empleados del sector en un contexto de alta inflación y creciente presión económica.
La CNTA, en una decisión consensuada entre representantes gremiales y empleadores, aprobó una serie de incrementos salariales escalonados que culminarán en octubre con una remuneración mínima que supera los 700 mil pesos. Esta actualización salarial beneficiará a miles de trabajadores rurales en todo el país, abarcando a aquellos que se desempeñan en actividades como la agricultura, la ganadería, la fruticultura y otras ramas del sector agroindustrial.
Desde Octubre, los salarios quedarán de la siguiente forma:
PEÓN: Salario Básico $ 700.817,22.-
Adicional por trabajo en Zona Patagónica (20% sobre el Salario Básico) $ 140.163,44.-
Adicional Voluntario Remunerativo: $ 175.204,31.-
CAPATAZ: Salario Básico: $ 916.453,29.-
Adicional por trabajo en Zona Patagónica (20% sobre el Salario Básico): $ 183.290,66.-
Adicional Voluntario Remunerativo: $ 229.113,32.-
Salarios de los trabajadores rurales del mes de noviembre
PEÓN: Salario Básico $ 718.337,65.-
Adicional por trabajo en Zona Patagónica (20% sobre el Salario Básico) $ 143.667,53.-
Adicional Voluntario Remunerativo: $ 179.584,41.-
CAPATAZ: Salario Básico: $ 939.364,62.-
Adicional por trabajo en Zona Patagónica (20% sobre el Salario Básico): $ 187.872,92.-
Adicional Voluntario Remunerativo: $ 234.841,16.-
El incremento salarial también incluye mejoras en otros aspectos laborales, como bonificaciones por antigüedad y por productividad, así como un aumento en las prestaciones adicionales para los trabajadores temporales. Además, se establecerán mesas de negociación para revisar las condiciones laborales y ajustar los salarios en función de la inflación y las necesidades del sector.
Este aumento es visto como una respuesta necesaria en un momento en que los costos de vida continúan en ascenso y la inflación afecta gravemente los ingresos de los trabajadores. Sin embargo, algunos sectores advierten que, si bien es un avance significativo, todavía es necesario continuar trabajando en la mejora de las condiciones laborales y en la estabilidad del empleo en el ámbito rural.
Con este ajuste, el gobierno y las entidades gremiales buscan fortalecer el poder adquisitivo de los trabajadores rurales y asegurar que puedan enfrentar el actual contexto económico con mayores herramientas y seguridad. Se espera que la medida impacte positivamente en el sector agropecuario, uno de los pilares de la economía nacional.
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