Delta Center: más detalles sobre la explotación laboral a trabajadores salteños

Nuevos detalles han salido a la luz sobre el caso de explotación laboral en el lujoso complejo Delta Center, ubicado en Nordelta, donde trabajadores salteños habrían sido sometidos a condiciones de trabajo esclavo. Recordemos que hay un prófugo y varios detenidos acusados de someter a trabajo esclavo a varios hombres.

Según las denuncias, los trabajadores, contratados para realizar tareas de construcción en el exclusivo complejo, vivían hacinados en habitaciones donde llegaban a dormir hasta 35 personas juntas. Además, recibían salarios muy por debajo de lo pactado y les retenían los documentos, lo que impedía su movilidad y los mantenía bajo el control de los empleadores.

"Nos obligaban a dormir hasta 35 personas en una habitación. Era imposible descansar, y las condiciones eran insalubres", denunció uno de los trabajadores afectados.

Entre los testimonios más alarmantes, se destaca el de un obrero que sufrió un grave accidente con una amoladora. A pesar de la gravedad de la lesión, no se le permitió ir al hospital, dejando en evidencia el desprecio por la salud y la integridad de los empleados.

Organismos de derechos laborales han expresado su indignación ante la situación, calificando el caso como un ejemplo extremo de explotación laboral en plena zona de lujo. "Es una contradicción indignante: mientras se construyen edificios de primer nivel, se explota a quienes los hacen posibles. Esto no puede quedar impune", declaró un representante de una organización sindical.

Por su parte, las autoridades locales y nacionales han anunciado investigaciones para determinar responsabilidades y sancionar a los involucrados. La Justicia también analiza si existen vínculos con redes de trata de personas, dado el control ejercido sobre los trabajadores mediante la retención de documentos.

El caso ha generado un fuerte repudio social y ha puesto en evidencia las desigualdades extremas que persisten en sectores exclusivos como Nordelta, donde el lujo convive con la explotación de los más vulnerables. Mientras tanto, los trabajadores y sus familias exigen justicia y condiciones dignas que les permitan recuperar su autonomía y su dignidad.