Los afiliados a OBSBA día a día ven cómo la obra social se desmorona. Los turnos se vuelven eternos, los prestadores se caen y nadie da respuestas.
La obra social de la Ciudad de Buenos Aires viene en caída libre desde hace años. Entre denuncias de vaciamiento y cambios en la cúpula de la misma, la gestión reciente del presidente Alejandro Amor no mejoró el oscuro panorama.
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OBSBA no da respuestas como lo muestran los afiliados en el grupo de facebook: Trabajadores y afiliados en defensa de OBSBA.
Allí se acumulan lo comentarios sobre lo díficil que es conseguir un turno, lo caótico del sistema, las infinitas colas de espera en los hospitales y la caída de prestaciones.
Muchos afiliados se quejan por ejemplo, de la falta de médicos en sanatorios como el Méndez o el Cemic en una triste realidad que ya se vuelve costumbre.
Desde la web de la obra social paradójicamente se jactan de tener «un centro de salud, el Sanatorio Méndez y redes prestacionales en todos los niveles de atención y complejidad, destinados a proporcionar una cobertura integral y de ágil acceso».