20/09/2024

Obras sociales

Máxima preocupación del sector textil por el futuro de las obras sociales del área

Crece la Preocupación del sector textil por las obras sociales. Para Hugo Benítez, secretario general de la AOT, las condiciones actuales "ponen en riesgo la calidad y continuidad del sistema solidario al que accedió, siempre la familia trabajadora".

Los sindicatos de la industria textil, como la Asociación Obrera Textil (AOT) y el Sindicato Obrero de la Industria del Vestido y Afines (SOIBA), han manifestado una creciente preocupación por la grave crisis que enfrenta el sector laboral, la cual pone en riesgo la sostenibilidad de las obras sociales que dependen de este.

De hecho,Hugo Benítez, secretario general de la AOT, expresó su inquietud ante el panorama crítico que afecta tanto a los trabajadores como a las estructuras de protección social que estas organizaciones brindan.


Para Benitez de hecho, la crisis laboral actual "pone en riesgo la calidad y continuidad del sistema solidario al que accedió, siempre la familia trabajadora".

Benítez destacó que la situación se ha agravado debido a la reducción de la actividad económica en el sector textil, lo que ha generado un impacto negativo en los empleos y en los aportes destinados a las obras sociales. Estas, que son fundamentales para garantizar el acceso a la salud y otros beneficios sociales de los trabajadores, corren el riesgo de desfinanciarse si no se toman medidas inmediatas.

Además, Jorge Rojas del Sindicato del Vestido (SOIVA), explicó que: "La crisis se aceleró desde fines del año anterior, llevando a la pérdida de fuentes de empleo y al cierre de empresas en todo el sector". También, Heraldo Mage de la Unión de Cortadores de Indumentaria (UCI), sostuvo que, por la caída en los aportes, "se vive una brutal baja en la recaudación de las organizaciones

Los sindicatos han instado a las autoridades gubernamentales y a los actores de la industria a buscar soluciones conjuntas para reactivar el sector, evitar la pérdida de puestos de trabajo y asegurar la viabilidad de los servicios sociales que benefician a miles de trabajadores y sus familias. Además, señalaron la necesidad de implementar políticas que fortalezcan la competitividad del sector textil y protejan los derechos laborales.

La crisis actual en la industria textil es un reflejo de los desafíos que enfrentan varios sectores productivos, lo que exige una intervención coordinada y oportuna para evitar mayores consecuencias sociales y económicas.

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