Federico Sturzenegger: "Seguiremos despidiendo empleados estatales para reducir el gasto público"

En declaraciones recientes televisivas, el economista y ex presidente del Banco Central de la República Argentina, Federico Sturzenegger, aseguró que es necesario continuar con el recorte de personal en el sector estatal para disminuir el gasto público y mejorar la eficiencia del Estado.

"Argentina enfrenta un problema estructural con su déficit fiscal, y gran parte de ello proviene del gasto en un aparato estatal sobredimensionado. Es imperativo reducirlo para garantizar la sostenibilidad económica a largo plazo", afirmó Sturzenegger en una conferencia sobre políticas económicas en Buenos Aires.

El exfuncionario indicó que los despidos en el sector público no son una medida deseada, pero sí necesaria para corregir los desequilibrios fiscales que afectan la economía del país. "El objetivo no es perjudicar a los trabajadores, sino priorizar un Estado eficiente, que responda a las necesidades de los ciudadanos sin comprometer su solvencia financiera", añadió.

Sturzenegger y la motosierra a estatales

Estas declaraciones generaron reacciones inmediatas desde distintos sectores. Representantes sindicales calificaron la medida como un "ataque a los derechos laborales" y advirtieron sobre el impacto social de los despidos masivos. "Despedir empleados estatales no resuelve los problemas estructurales, solo profundiza la desigualdad y la precarización laboral", expresó Sergio Palazzo, líder de La Bancaria.

Por otro lado, economistas cercanos al liberalismo respaldaron las palabras de Sturzenegger y coincidieron en que reducir el tamaño del Estado es un paso clave para estabilizar la economía. "El Estado debe concentrarse en sus funciones esenciales y permitir que el sector privado impulse el crecimiento", opinó el analista económico Juan Carlos de Pablo.

La declaración llega en un contexto de alta inflación y una deuda pública creciente, lo que coloca al Gobierno bajo presión para implementar medidas de ajuste fiscal. Sin embargo, el debate sobre cómo lograr un equilibrio entre la eficiencia estatal y la protección social continúa dividiendo opiniones en Argentina.