Trabajadores del Hospital de Salud Mental Laura Bonaparte comienzan a recibir telegramas de despido del gobierno de Milei

Los trabajadores del Hospital de Salud Mental Laura Bonaparte han comenzado a recibir correos electrónicos notificándoles su despido como parte de un ajuste masivo en el área de salud pública implementado por el gobierno de Javier Milei. Según fuentes oficiales, el recorte incluye un total de 1.400 despidos que abarcan tanto al personal del hospital como a otros organismos, como la Superintendencia de Servicios de Salud.

Los empleados del Hospital Laura Bonaparte, un reconocido centro dedicado a la atención de la salud mental, han iniciado asambleas y medidas de protesta para rechazar esta decisión. "Esto no es solo un ataque a los trabajadores, sino también un golpe a los derechos de los pacientes más vulnerables, que dependen de este sistema público para recibir atención digna", expresó Ana Rodríguez, delegada sindical del hospital.

Los mails de despidos del Bonaparte

El gobierno justificó los despidos como parte de una estrategia para reducir el gasto público y "ordenar las cuentas del Estado". Sin embargo, sindicatos y organizaciones sociales denuncian que estas medidas atentan contra el acceso a servicios esenciales, especialmente en un área tan sensible como la salud mental.

Mientras las notificaciones continúan llegando, los trabajadores del Hospital Laura Bonaparte han organizado una movilización para los próximos días en la Plaza de Mayo, donde planean exigir la reincorporación de los despedidos y frenar los ajustes en el sistema de salud pública. Desde el gremio UPCN sostienen que "No nos oponemos a reordenar el funcionamiento de los organismos o la reestructuración de la que hablan las autoridades para brindar mejores servicios a la comunidad. Pero no a vaciarlos con la excusa de los despidos: en el Bonaparte, echaron a casi el 50% del personal -manifestó Gueren-. Si hoy se abre una mesa de diálogo que permita que las autoridades de Salud entiendan que se extralimitaron y se pueda revisar la situación de los 1.400 contratos que no renovarán, caso por caso, y el cierre de áreas clave, no habrá conflicto. De lo contrario, tomaremos las medidas directas que nos competen como gremio."

La situación ha generado un intenso debate en la sociedad, dividiendo opiniones entre quienes respaldan la necesidad de un ajuste fiscal y quienes consideran que el costo social de estas medidas es inaceptable.